Los terneros no son los únicos bebés que comemos

A menudo escuchamos a las personas decir que no comen “ternera porque matar a un bebé está mal”. Pero ¿si les contáramos que cada animal que fue brutalmente asesinado en una granja industrial era un bebé? ¿Nos creerían? Lee esto:

Pavos


La vida natural de un pavo es de 10 años, pero a través de la cría selectiva, llega a su “tamaño para el mercado” en un período de 8 a 26 semanas. Literalmente, son sólo bebés.

Patos

En la naturaleza, los patos también pueden vivir hasta 10 años, pero como la mayoría de las aves en las granjas industriales, son asesinados cuando tienen de 8 a 26 semanas. Una vez más, eran bebés.

Gallinas explotadas para poner huevos

Las gallinas en las granjas industriales padecen una vida miserable, a menudo hacinadas en jaulas en batería. Aunque podrían vivir hasta ocho años, debido a la anormalmente alta producción de huevos, viven por lo general un año o dos. En la naturaleza, las gallinas ponen un huevo al mes, pero en las granjas industriales ponen alrededor de 27 huevos al mes, lo que tiene un enorme impacto en sus frágiles cuerpos.

Pollitos


En las granjas dedicadas a la producción de huevos, los pollitos machos son asesinados porque no ponen huevos ni crecen lo suficientemente rápido para ser explotados “rentablemente” como carne. Estos pollitos son asesinados a las pocas horas de romper el cascarón. Algunos son triturados vivos mientras otros son gaseados o sofocados. Si se les diera la oportunidad, estos pequeños podrían vivir hasta ocho años. Más vidas arrebatadas.

Gallinas criadas para convertirse en carne

Conocidas como “pollos de engorde”, estas aves son criadas para crecer tan rápido que sus piernas a menudo se rompen debido al peso de su cuerpo. Si fuesen libres, estas aves podrían vivir durante ocho años, pero son asesinadas cuando apenas tienen seis semanas.

Pez gato


Al igual que las vacas, los cerdos, los pavos, los patos y las gallinas, el pez gato que se cría en las granjas piscícolas es asesinado a una edad muy temprana. Estos peces están hacinados en sucios tanques y son asesinados alrededor de los dos años de edad. En la naturaleza, estos peces inteligentes y sensibles podrían vivir de 20 a 30 años.

Cerdos criados para convertirse en carne

Mientras que los cerdos en la naturaleza viven cerca de 15 años, en las granjas industriales se crían selectivamente para crecer muy rápido, alcanzando el tamaño deseado para el mercado en apenas seis meses. El crecimiento rápido afecta a estos tiernos animales, a menudo causándoles problemas en las articulaciones. ¡¿Qué hay de normal en eso?!

Cerdas mamás


Las cerdas en las granjas industriales son inseminadas artificialmente y confinadas en pequeñas y mugrosas jaulas. En la naturaleza, podrían vivir 15 años, pero en lugar de eso son asesinadas cuando tienen de 3 a 5 años de edad porque sus cuerpos no pueden sostener la cría constante. Son tratadas como máquinas para producir bebés.

Vacas en granjas lecheras


Mientras que su vida natural es de 25 años, las vacas criadas en las granjas industriales de productos lácteos están tan agotadas físicamente por la inseminación constante que a menudo son asesinadas cuando apenas tienen de cuatro o cinco años. Horrible, ¿verdad?

Vacas criadas para convertirse en carne

La vida natural de las vacas es de unos 15 a 20 años, pero debido a la cría selectiva, las vacas en las granjas industriales son asesinadas a los 18 meses de edad. No sé qué opines, pero para mí son apenas unos bebés.

Terneros


Sí, ya sabemos, no comes “ternera” porque proviene de bebés. Pero, como dijimos, todos los animales asesinados en las granjas industriales son apenas unos bebés. Los terneros criados para convertirse en “ternera” pueden vivir de 15 a 20 años, pero a menudo son asesinados a las 32 semanas.

¿Quieres aprender más sobre la vida de las vacas, los cerdos, las gallinas, los peces, los pavos y otros animales explotados como alimento? Mira.


Por suerte, los consumidores pueden dejar de apoyar el cruel negocio de las granjas industriales adoptando una alimentación a base de plantas, saludable y compasiva.

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